R. Opisso representa la figura del cronista gráfico de una época. De formación autodidacta, ya que únicamente asistió un día a la Llotja, muy pronto formó parte de los círculos modernistas participando en las tertulias y conociendo a sus protagonistas. Trabajó como aprendiz en el taller del arquitecto A. Gaudí, amigo de su padre, practicando el dibujo artístico y ocupándose del archivo fotográfico de los moldes de las esculturas.
En 1898 empezó a publicar en la revista modernista Luz. Más adelante, entró como socio en el Círculo de Sant Lluc, y, con los compañeros del centro, realizó su primera exposición en la Sala Parés (Petritxol, 5). Entre 1906 y 1912 vivió en París, donde recibió una intensa influencia de los dibujantes franceses de la época y donde colaboró en muchas revistas gráficas plasmando el ambiente bohemio de la ciudad.
A su regreso a Barcelona se introdujo activamente en las tertulias de la taberna Els Quatre Gats (Montsió, 3 bis).
Sus colaboraciones en revistas como Cu-Cut!, La Campana de Gràcia o L'Esquella de la Torratxa eran continuas, y se hizo conocido, sobre todo a partir de 1910, por las llamadas "multitudes", dibujos con muchas figuras humanas y con un aire muy urbano. También ilustró libros infantiles.
Asimismo, cultivó la pintura, de la que destaca Carretó de cafè amb llet (Carretón de café con leche, principios del siglo XX; fondo MNAC).
Una leyenda cuenta que el 14 de abril de 1931, cuando el partido de Esquerra Republicana ya había ganado las elecciones, Lluís Companys iba por la calle hacia la plaza de Sant Jaume con la intención de proclamar la República, y en el trayecto invitaba a los amigos que se encontraba a que lo acompañasen. Uno de aquellos amigos fue R. Opisso, quien, pensando que se trataba de una broma, lo acompañó hasta la plaza de Sant Jaume, donde Companys hizo lo que había dicho, proclamar la República Catalana.