Fue un hombre polifacético: poeta, crítico de arte, ilustrador y coleccionista de arte.
Fue el promotor, ilustrador y redactor de la revista Luz, a través de la que promovía los postulados simbolistas. Como ilustrador, trabajó en la Revista Gràfica. También colaboró en el periódico El Poble Català como crítico de arte. Asimismo, es autor del poema Boires baixes (Nieblas bajas, 1902), musicalizado por E. Granados e ilustrado por L. Bonnín, que alcanzó una gran difusión.
Su carrera artística tuvo lugar en el periodo modernista. Cuando se inició el declive de este estilo para dar paso a nuevas ideas, lo abandonó para dedicarse al mundo de los negocios industriales, en el que consiguió un gran prestigio.