Este proyectista de origen catalán que se instaló en La Habana, donde desarrolló su profesión, trabajó junto con el arquitecto Arturo Marqués en la Casa Pedro Pernas (1906; Malecón y Gervasio, Centro Habana; desaparecida), considerada la primera casa que se enmarcó en la producción arquitectónica de influencia del Modernismo catalán en La Habana. Asimismo, se atribuye a estos dos arquitectos la Casa Braulio Menéndez (1913; Mercaderes, 265-267, La Habana), también conocida como la Casa de los Pelícanos.